En la actualidad, invertimos un tercio de nuestras vidas en el trabajo y no podemos pensar en ello solo en términos económicos. Sí, trabajas por dinero, pero si quitas la parte económica, ¿con qué te quedas? ¿por qué trabajas?
Un estudio de la consultora Deloitte ha constatado que la generación millennial, esto es, los trabajadores nacidos entre los años ochenta y noventa, valoran todo lo relacionado con el salario emocional en mayor medida que las generaciones anteriores. Pero, ¿cómo implementar el salario emocional en tu empresa?
Es la retribución no monetaria, que el colaborador recibe a cambio de su trabajo. Se asocia con la satisfacción de necesidades personales, profesionales y familiares para mejorar su calidad de vida.
Hoy en día, algunas empresas lo usan a su favor para atraer talento o conseguir la lealtad de sus colaboradores. La realidad es que no hay nada más improductivo que un empleado infeliz. Eso está comprobado. Pero ¡cuidado!, los expertos advierten que un salario emocional alto nunca puede compensar un salario económico bajo. Buscar un equilibrio con sueldos de acuerdo con el mercado generará mayor éxito en la implementación de salario emocional en tu organización.
1. Disminuye la rotación de personal
Los trabajadores que encuentran otros alicientes para permanecer en la empresa además del salario, resultan más difíciles de seducir por otras ofertas de empleo. Salvo que las condiciones salariales sean muy dispares, los empleados no darán el paso de cambiar de empresa si la actual les ofrece un entorno de trabajo agradable.
2. Menor absentismo laboral
Aunque se trata de una cuestión estrechamente relacionada con la ética profesional, el absentismo laboral también puede reducirse si se refuerza el salario emocional. Esta ventaja parte de la base de que un porcentaje de las ausencias podría evitarse si la rutina diaria fuera más positiva para el empleado, que tendría menos alicientes para no acudir al trabajo, salvo causas de fuerza mayor, lógicamente.
3. Menores costes operativos y mayor productividad
Contrariamente a lo que podría pensarse, la mejora de las condiciones que influyen en el salario emocional no tiene por qué implicar un aumento de los costes operativos. De hecho, podría suceder exactamente lo contrario. Dado que una de las mejores técnicas para reforzar esta variable es ofrecer la posibilidad de cubrir parte de la jornada con el teletrabajo, la inversión en el mantenimiento de las instalaciones de la empresa podría reducirse.
Recuerda que una mayor satisfacción de los empleados puede suponer un incremento significativo en su productividad.
Autonomía y pertenencia. Que es tener libertad para realizar proyectos propios y sentir que pertenecemos a un equipo que nos valora son elementos del salario emocional.
Creatividad. Mucha gente cree que la creatividad es algo únicamente de artistas, pero hasta la gente con trabajos que se consideran más ‘serios’ pueden poner su sello creativo en el trabajo.
Dirección. La proyección de carrera en el futuro, la perspectiva a mediano y largo plazo en la carrera del colaborador. Esto se logra mediante la promoción interna.
Disfrute. Es la parte de gozar y de tener momentos agradables en el trabajo.
Maestría. Se refiere a la satisfacción que se siente con el trabajo bien hecho que nos llena de orgullo. También es lo que hace que cada día con tu trabajo te vuelvas un poco mejor.
Inspiración. Aquellos momentos que tu tienes gracias a tu buen trabajo que te generan un sentimiento de posibilidad, que te inspiran una nueva perspectiva sobre las cosas que tal vez antes no habías visto.
Crecimiento personal y profesional. Gracias a tu trabajo te enfrentas a posibilidades que te ayudan a utilizar tus fortalezas de carácter que te hacen ser mejor persona y a sacar lo mejor de ti mismo. ¿Sientes que tu trabajo te hace ser mejor persona? Es una pregunta que debes plantearte para valorar tu salario emocional.
Sentimiento de propósito. Que tengas la sensación de que tu trabajo contribuye a tus propios propósitos y a los de la organización, que todo lo que haces tenga para ti un significado.
Reconocimiento personal. A todos nos gusta que nos digan que nuestro trabajo está bien hecho. Que un superior tenga alguna palabra de elogio hacia nosotros puede aumentar nuestra motivación, además de que por parte de la empresa esta acción, a la par que sencilla, es gratuita.
Teletrabajo y flexibilidad horaria. Esta iniciativa del Home Office es muy valorada por los colaboradores, ya que nos permite mejorar la conciliación laboral y evitar los inconvenientes del desplazamiento como son gastos, estrés y tráfico. Es una medida sencilla, sin coste para la empresa y que mejora en gran medida la productividad y la felicidad de los trabajadores. No todos trabajamos igual de bien en las mismas horas del día, así que no sólo es positivo porque fomenta la conciliación laboral, sino que también ayuda a incrementar el nivel de eficacia.
Contar con un lugar de trabajo agradable. Si el espacio lo permite, contar con una zona donde los colaboradores puedan tomarse un descanso, áreas de esparcimiento o con oficinas de luz natural o presencia de plantas, puede ayudar a que los trabajadores se sientan más cómodos en el lugar de trabajo.
Favorecer la vida sana. Ofrecer servicios de fisioterapia, hacer alguna sesión de yoga, o disponer de una pequeña mesa de ping pong, son algunas de las acciones que podrían llevarse a cabo relacionadas con el deporte y la vida sana. Además de favorecer la felicidad, ayuda a reducir los niveles de estrés.
Poner en práctica todos estos puntos sin duda abonará de manera considerable al Salario Emocional que tu empresa puede ofrecer a tus colaboradores y que desembocará en una mayor productividad y en un cambio positivo en tu Cultura Organizacional. Talentry es una metodología que sin duda te ayudará a consolidar e integrar estos beneficios en tu compañía. ¡No dudes en contactarnos! Conoce más de estos temas en nuestro siguiente material.